Bolivia
La realidad de Bolivia nos desafía a vivir con hondura y radicalidad nuestras Opciones como la de: “Seguir apostando por presencias de vida compartida en pueblos, barrios marginales, periferias y fronteras, desde las comunidades inter, el laicado y el trabajo en red con, organizaciones comprometidas con la eco justicia y el cuidado de la casa común, con una opción preferente por las mujeres y las personas migrantes, en fidelidad al seguimiento a Jesús y a nuestro carisma” (Opción 1).
La comunidad de ACJ continuamos insertas en contextos de exclusión, en El Alto- La Paz – Bolivia, comprometidas especialmente desde el Centro “Wara Wara”, en la promoción y capacitación de las mujeres con escasos recursos, para generar nuevas oportunidades de desarrollo personal, social y económico, a partir del área humanística y la capacitación técnico- productiva, la promoción de los valores humano cristiano; y desde el hogar “ Luz de Esperanza” que alberga chicos de la calle, favoreciendo su rehabilitación y su reinserción a la sociedad. Apoyamos desde nuestras posibilidades, la formación en la fe de la comunidad cristiana.
Movidas por la esperanza que fundamenta nuestra fe en Seguimiento a Jesús de Nazaret, favorecemos el trabajo por la dignificación de la persona, la inclusión, el cuidado de la casa común, la JPIC. Arriesgándonos cada vez más a salir de nuestra comodidad, nos ponemos en camino, alentadas por el Papa Francisco: “Invito a la esperanza, que nos habla de una realidad que está enraizada en lo profundo del ser humano … Nos habla de una sed, de una aspiración, de un anhelo de plenitud, de vida lograda … La esperanza es audaz, sabe mirar más allá de la comodidad personal, de las pequeñas seguridades y compensaciones que estrechan el horizonte, para abrirse a grandes ideales que hacen la vida más bella y digna» ( Fratelli. Tuti Nº 55)
Disfrutamos de las relaciones gratuitas y fraternas que nos da el ser “casa abierta”, ya que, entendemos que vivir la comunión es vivir en misión, dando y recibiendo mutuamente.